* N° 1833 Julio 2008 Editorial

ALBORNOZ....EL CAMPO DE DEPORTES Y EL DOCE BOCAS

Está aún en nuestras retinas aquellos partidos de juveniles rojos cuando seguidamente enfrentábamos a Chuy, Lascano y Rocha. En determinada etapa, la cancha de la Plaza de Deportes era donde la selección roja juvenil jugaba los partidos de local. Eran los tiempos de Albornoz, de Albornoz Amaral, a quién recordábamos desde niño en la época que veraneábamos en Aguas Dulces detrás de su rancho, ubicado en lo que hoy es el Super Popo. El trabajo ordenado , prolijo, cuidadoso de los árboles, del medio ambiente, desarrollado en el campo del MGAP de Aguas Dulces, lo catapultó a la Plaza de Deportes castillense. Desarrolló una gran labor, meticuloso, celoso de su función, convirtió al escenario en un verdadero parque... Era un ambientalista en serio..... Se hacía querer y respetar por los chiquilines y los mayores que practicaban los diferentes deportes .Acrisolada honestidad y seriedad en sus procedimientos llevan a que se mantenga vigente el recuerdo de quiénes lo conocimos y utilizamos de una forma u otra “ su plaza de deportes “

Que alegría seguramente sentiría Albornoz si pudiera hoy asistir a la gran transformación que está teniendo este centro deportivo. Ha sido cerrado con una malla impecable, alta, en todo su alrededor. El sector de cancha de basquetbol está siendo atendido muy especialmente, dándole al piso lo adecuado para jugar este deporte. No hemos constatado aún las mejoras o modificaciones que podrían tener las canchas de baby y de fútbol mayor.

El acceso al complejo tropezó con la dificultad, no tan sencilla, de la rotura del puente que une a la calle Silva con el mismo y principalmente con la zona del Hogar de Ancianos y del Barrio Doce Bocas.En este momento, ha sido levantado y se está trabajando en el prolijado del fondo que será la base para el levantamiento de la nueva estructura. Sería una oportunidad , un momento ideal para prolijar con cordón cuneta y entubado y enjardinado estas dos cuadras que acceden desde Silva al Complejo de Deportes y de esa forma culminar no con una mera, aunque muy importante, sustitución de algo que ya existía , agregando una mejora que adorne el lugar cuando se proceda a la inauguración del mismo.

Al pasar no podíamos obviar la situación del Barrio Doce Bocas , un barrio perdido en la ciudad, lejos de la civilización, aunque con una ventaja que no ha sido aprovechada por las administraciones, una ubicación priviligiada, al lado de una ruta nacional, donde transitan miles de automotores de todas las nacionalidades. Creemos que en estos lugares la municipalidad debería ambientar lugares para la exposición de diferentes tipo de actividades en lo que se denomina comúnmente centro de barrio extendiendo esta forma de organización a locales para la explotación de minimercados, oficinas de servicios varios, artesanatos. De esta forma se obtiene una nejora económica para el vecindario, un movimiento adicional, que pueden indirectamente desembocar en ingresos de diversos visitantes al centro de la ciudad. Ha habido esfuerzos vecinales apuntando al desarrollo de comercios con frente a la ruta, algunos realmente exitosos como la gomería y otros no tanto como minirestoranes o bares. El esfuerzo de la Junta Local es indispensable para desarrollar algo como lo que estamos planteando. El comienzo es un acceso amplio, el prolijado permanente del lugar, la bonificación para habilitaciones comerciales, exoneraciones contributivas por determinada cantidad de ejercicios, convenios con los vecinos para el pintado de frentes y muros acordes a los objetivos que se deseen alcanzar.

En cuanto a la situación del barrio mismo entendemos que es impostergable la iluminación del trayecto entre Silva y el Hogar de Ancianos, no olvidemos las desgracias del pasado alentadas en una situación de penumbra. Ni que hablar de que el barrio necesita luminarias en su centro y también frente a la ruta. El reclamo de un prolijado a fondo del barrio es insistente, viven en él gente de escasos recursos, pero también de trabajo y de joven y mediana edad. Le dejamos planteadas estas interrogantes a las autoridades locales y municipales, para que tomen apuntes y aunque estamos a un año y poco para un relevo , creemos que es tiempo de realizaciones.